Entradas

Mostrando entradas de enero, 2014

Ella era nieve.

Imagen
Ella era nieve en las montañas más altas. Su blancura era como el sol, deslumbraba. Pero era inevitable querer mirarla porque una vez la intuías con el rabillo del ojo te hipnotizaba. Brillaba como el azúcar. Se antojaba suave y perfecta, con curvas delicadas y decorada con adornos, como abetos cubiertos de blanco  y rocas poderosas. Era magnética: nadie se conformaba con mirarla. Querían recorrerla y descubrir todos sus rincones y sus preciosas vistas. Arriesgarse, volar sintiendo la adrenalina propia de la combinación perfecta: oxígeno, velocidad y control. Y ella satisfacía a todos, a los más valientes y a los que se conformaban con sentir el placer que daba pasear tranquilamente a su lado o sobre ella, con la música que nace del silencio y el crujido suave y delicado de su susurro. Pero no era todo como parecía. Cuando ella enfurecía, sus encantos  se convertían en amenaza y riesgo extremo. Como también había embrujado al cielo y éste sólo quería complace...